El boom de las marcas blancas empuja a los comparadores de supermercados a reinventarse
¿Quién no ha comprado alguna vez marcas como Hacendado, Deliplus, o Carrefour? Estas marcas, conocidas tradicionalmente como marcas blancas, han alcanzado ya una cuota de mercado de prácticamente el 50% en 2022, un aumento considerable desde el 40% que tenían diez años atrás.
Ya desde antes de la pandemia, supermercados como Mercadona habían comenzado a priorizar sus marcas propias. Originalmente, estas marcas blancas empezaron siendo productos literalmente envasados en recipientes blancos, cuya máxima era reducir el precio todo lo posible. Sin embargo, con el paso de los años estas marcas blancas se han convertido poco a poco en marcas propias, o marcas del distribuidor, que ya no priorizan simplemente el coste, sino que más bien tratan de proporcionar una relación calidad-precio óptima. Así, marcas como Hacendado tratan de encontrar aquellos proveedores, o aquella cadena de suministro que, consiguiendo una buena calidad, ajusten el precio lo máximo posible.
Muchos consumidores han comenzado a optar por las marcas blancas con el paso de los años, especialmente después de la escalada de precios post-pandemia. Pero hay que tener cuidado, ya que las marcas blancas pueden ser un arma de doble filo. A veces pensamos que las marcas blancas son las más baratas, y no nos paramos a comprobar si realmente este es el caso. Así, el consumidor termina cautivo de estas marcas, a las que se cambió por un ahorro que ya no obtiene. De hecho, en el momento en el que se escribió este artículo, solo la marca blanca de Día está en el top tres de los aceites de oliva virgen.
El nuevo desafío de los comparadores de supermercados
La creciente presencia de marcas blancas en la cesta de la compra supone, a primera vista, un claro beneficio para el consumidor, que tiene una amplia gama de productos entre los que elegir. Sin embargo, esta diversidad también puede ser un arma de doble filo. El mercado, antes copado por unas pocas opciones, es ahora un laberinto de artículos que puede llegar a atrapar al ahorrador, llevándolo a creer ciegamente en las marcas blancas. Esta situación no solo supone un reto para los consumidores, sino para los comparadores de supermercados, que se ven obligados a reinventarse.
Tradicionalmente, la estrategia más común de los comparadores era centrarse en productos concretos e identificar qué supermercado los vendía más baratos. ¿Dónde puedo comprar el aceite de oliva suave La Española al mejor precio? Era la pregunta que trataban de resolver los comparadores de supermercados. Esta sigue siendo la estrategia más popular entre los comparadores, y grandes servicios de comparación generalistas han experimentado una explosión en popularidad siguiéndola. Sin embargo, el cambio en la dinámica de los consumidores a la hora de llenar su cesta de la compra hace que esta manera tradicional de comparar productos se quede, en parte, obsoleta. Los clientes ya no buscan el supermercado más barato para comprar un producto concreto; ahora se preguntan qué producto elegir y dónde comprarlo. Ya no se trata solo de encontrar aquel supermercado con el precio más bajo para un artículo específico, sino de descubrir productos nuevos que optimizan el coste de la cesta. Los comparadores modernos, por lo tanto, deberán dejar en un segundo plano las pantallas clásicas en las que se comparan diferentes supermercados para un artículo concreto, y tendrán que ofrecer una comparativa más amplia, incluyendo todas las opciones de cada categoría.
La estrategia de Mercastic
En Mercastic sabemos lo que duele que los precios suban, y hemos decidido ayudarte. Aunque no somos el primer comparador de supermercados, si que somos los primeros en atajar directamente al boom de las marcas blancas. Hemos dejado a un lado la vieja forma de comparar y, en su lugar, hemos creado una taxonomía propia en la que agrupar los productos que comparamos.
Cuando buscas pechugas de pollo, eso es exactamente lo que verás, no te mostraremos muslos, alas, solomillos, o incluso conejo como hacen algunos supermercados. Si quieres alubias blancas lo mismo, no te mostraremos frijoles, ni alubias pintas, ni alubias rojas. En Mercastic lo que nos importa es que puedas hacer una comparación efectiva, yendo un paso por delante de comparadores tradicionales.
Nuestro índice de productos se ha diseñado aprovechando nuestra taxonomía única. Tanto en la página principal como en el buscador, encontrarás categorías como aceite de oliva virgen extra, pechuga de pollo, macarrones, o nueces. Al explorar alguna de estas categorías, tendrás a tu disposición un listado con todas las opciones disponibles. Por defecto, este listado de precios y opciones está ordenado por precio unitario, pero tendrás la flexibilidad de ordenarlas por precio total, o incluso aplicar filtros como supermercado, marca, o cantidad.
Aunque eventualmente incluiremos también páginas dedicadas a la comparación tradicional basada en productos, nuestra prioridad en el lanzamiento es la de comparar a nivel de categoría. De hecho, y viendo la creciente popularidad que tienen las ofertas semanales de algunos supermercados, creemos que incluso sería más útil para el cliente continuar el desarrollo de Mercastic hacia la incorporación de las ofertas publicadas en folletos. La app de fidelización de algunos supermercados está en el top de apps más descargadas en España, esto pone de manifiesto la importancia que tiene para los usuarios las ofertas.
Independientemente de la estrategia que se siga, está claro que la comparación de precios está cada vez más presente en los hogares españoles. En Mercastic hemos decidido priorizar la comparación en base a categorías en lugar de productos individuales, atajando así la creciente popularidad de las marcas blancas. Además, en este articulo también te hemos dado alguna pista sobre futuras funcionalidades en las que ya estamos trabajando, como la incorporación de ofertas semanales a la comparativa de supermercados. Te invitamos a probar nuestro comparador, y esperamos que te ayude a ahorrar en tu próxima compra!